Pasando por Brasil, llegamos a Paraguay al medio día.
Exitación total, mucha confusión, es difícil con tantos shoppings /puestitos / vendedores ambulantes / etc.
Anteojos Ray Ban para él y 2 Skolls; así si que se empieza bien.
"¿Cuanto por la tercer temporada de lost?" -
Cambiamos de idea: de comprar el cargador olvidado de la digital a comprar una descartable. Sorpesa: al parecer no hay mas cámaras descartables. Cambio de planes entonces: compramos una vieja y básica a 8 dólares
"después si quieren la tiran!" - nos dijo el vendedor.
Divertido, divertidísimo; entre cervezas y Pringles de White Cheddar fue fácil entrar en la onda del lugar.
Frutas frescas. Buses viejos por las calles, bien viejos. Y reiteradas llamadas de atención por demostraciones de afecto públicas, al parecer en Paraguay hay una Ley Universal, y dice que no da.
Truco clandestino debajo de los puentes peatonales. Chapitas.
Invasión sensorial.
La oferta de drogas era abierta y popular. Podías conseguir todo, de lo que quieras, todo. Pero...¿tomar pastillas azules adquiridas en la triple frontera? me imaginé ... otra de las famosas "buenas ideas" de la cerveza. Solo se me permitió comprar zapatillas All Star rojas y altas, con una calavera al costado. (obviamente que aun las miro extrañada).
Para el final del día adquirió el macho que me acompañaba una camiseta de la selección local; y de yapa se llevó una chica medio border, con Rey-Ben espejados y un morral colorido (costo: u$3 + $4,50 + 1000 guaraníes).
Tras fracasar en el intento de canjear la cámara por golosinas, la cambiamos por una pelota de fútbol azul eléctrico del mundial '06 en Alemania.
[Sonrío]
Volver a Argentina en un micro de linea, El Práctico; pasando por Foz de Iguaçu al atardecer.
- y... como para no enamorarse en un lugar así!
