lundi, août 05, 2013

Mi dragón

Simón nació el 15 de Julio. Y desde entonces todo es mágico.
Hasta su número de DNI es mágico. Posta.
Siento que siempre fuimos padres. Nos resulta natural toda esta potencialidad de amor y felicidad en su extremo último.
El tiempo disminuyó su velocidad, todo pasa más lento y suave. Cada momento es infinito y cada sensación lo abarca todo. Los proyectos avanzan y mi cuerpo vuelve a reconstruirse, lento, todo lento y hermoso.
Ahora mismo Simón duerme sobre el escritorio, a mi lado. Simón sueña (seguro sueña con tetas que vienen y van, razón para reír y llorar dormido). Y hace los ruiditos más divinos del continente.
No me gustaban demasiado los bebés, pero eso era antes, y porque no entendía que vienen de otra galaxia.
Mi hijo me parece el más hermoso del universo, obvio.

Archives du blog