samedi, mars 26, 2016

"Aunque parezca mentira a cualquier científico, no sentimos ni frío ni hambre. A veces nos preguntamos si no estaremos soñando. Mis hijos dicen que no, yo digo que sí, mi mujer dice que sí y que no. Pero yo pienso que un sueño no dura tanto, o por lo menos no es tan real. Según mis hijos, estaríamos en el espacio interplanetario. Las provisiones de alimentos que tenemos son interminables: en cuanto las comemos, las fuentes vuelven a llenarse. ¿Por qué será que la dicha y la desdicha inspiran el mismo temor?"

Silvina Ocampo, Del color de los vidrios.

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