mardi, février 27, 2007

Punto de fuga

Tengo que meterme al agua un poco.
Pero un poco más también.
Y más, y más.
Me voy de a poco flotando a mi realidad paralela.
De a poco también.
Lo dejé entrar, y él a mi.
**
Ese tipo de conexión es rara, más rara aun si ni siquiera se habla el mismo idioma. Tienen charlas memorables, aun si el lo dice en portugués y ella le responde en español.
El quiere hacerle rastas en toda la cabeza, dice que tiene la cara ideal para llevarlas.

- No, en toda la cabeza no, solo acá, abajo a la derecha.
- Toda
- No, una.
**

Quizás porque me di cuenta que hasta ahí llegaba.
No en toda mi cabeza, te dejo en un rincón (como a todo, a veces).

Siempre se siente diferente al famoso resto. Veo la salida con un cartel verde de "EXIT", luminoso (como a un bichito, la luz me llama. y no puedo evitar preguntarme si quema). Ahí esta en frente mio, abierta. Pero no es la primera vez que la veo, ni la primera vez que la esquivo.
Se siente.

- No, solo una.

Promesas a uno mismo, por eso siempre se olvidan. Porque uno siempre termina siendo uno, auténtico, el mismo. Así que al rincón, abajo. Super simbólico, veo todo así últimamente.

**

Al medio día, recién desayunados todos. Javi lavaba la ropa, Julia chongueaba con su new arrival, Lu reía con nosotros. Le pedí mi drechi.
Afuera era una casita afabelada, amarilla con vidrios de colores. Adentro un mundo.
Quedo linda, le puse un hilo rojo.
Perfecta.
Quizás porque me la hizo del lado izquierdo.

Archives du blog